Hasta la fecha, la medicina antroposófica viene ampliando la medicina existente en tres sentidos:
1. en lo referente a la comprensión de la salud y de la enfermedad,
2. en lo referente a la selección y a la concepción de medicamentos
3. en lo referente a los principios terapéuticos. El punto de partida es la noción de que el hombre y los reinos animal, vegetal y mineral están unidos entre sí por un desarrollo común y de que el proceso de la enfermedad en el hombre y en el animal están emparentados con los procesos que se dan en el resto de la naturaleza.
El acierto de la terapia consiste en reconocer el proceso de la enfermedad en el hombre y en el animal como un proceso natural correspondiente y aplicar para su curación el medicamento correspondiente de esta naturaleza. En lo esencial hay dos sistemas para reconocer las aportaciones vivas: la cuatriformación orientada a las fuerzas y la triformación funcional.
1.3 Salud y enfermedad La antroposofía entiende que la enfermedad se origina de las divergencias compensadas de la posición de equilibrio específica de los miembros esenciales. Bajo el aspecto de la cuatriformación, enfermedad significa una desproporción entre los cuatro miembros esenciales que participan en un lugar o en un proceso. Por lo tanto, se pueden mencionar las cuatro siguientes formas básicas: La organización sensitiva puede intervenir con demasiada fuerza y actuar desintegrando por encima de la medida necesaria; entonces se origina una inflamación o ‹digestión parenteral›. La organización vital puede desarrollar una actividad de síntesis con demasiada potencia prolífera carente de limitación e integración en el organismo en su conjunto. La organización física puede hacerse independiente e inducir las formas mórbidas escleróticas. La organización-yo puede finalmente intervenir erróneamente o puede que algo impida que intervenga correctamente. Entonces aparecen manifestaciones de parálisis o de convulsiones.16 En el sentido de la triformación la enfermedad se puede definir también como el predominio de uno de los tres sistemas en un lugar o en un momento en el que no es pertinente a una escala tal. Así resulta una migraña a causa de una inundación de ciertas regiones cerebrales con una actividad constructiva de transformación orgánica, por ejemplo como consecuencia de una sobrecarga nerviosa y de una actividad regenerativa reactiva pero excesiva;17 se trata por tanto de una sobrecarga del sistema de transformación orgánica. Por el contrario, las convulsiones dolorosas en el estómago y el intestino con paralización del peristaltismo son consecuencia de una intrusión del proceso interno nervioso en los órganos de transformación orgánica, siendo por tanto un proceso dislocado de conocimiento. Del reconocimiento del desequilibrio entre los miembros esenciales con el predominio o la debilidad de un miembro esencial o de un sistema funcional, puede derivarse entonces el tratamiento terapéutico.